Hojaldres de fresa

Yo soy de las que siempre ha dicho que "el hojaldre funciona bien con dulce o con salado".

En este caso preparé un postre para una comida en casa de nuestros amigos Javi y Ana. Muy sencillito y rápido y un resultado muy vistoso y buenísimo. Para salir de muchos apuros es la solución perfecta. Animaos a prepararla.

Ingredientes para 4 milhojas:

- 2 planchas de hojaldre preparado

- 400gr de fresas cortadas en laminas

- 150 ml de nata para montar

- 450 gr de queso crema tipo philadelphia

- 1 Cucharada de azúcar glass

- 125 gr de confitura de fresas (colado sin pepitas)

Precalentamos el horno a 200º. Con un cortador de galletas grande haremos 12 cortes redondos, cuadrados o de la forma que hayamos elegido de cortador. Colocamos los cortes de hojaldre sobre papel vegetal y horneamos durante 20 minutos o hasta que estén dorados.

 

Dejamos las fresas cortadas en láminas macerando en la confitura.

Para preparar el relleno montamos la nata y la mezclamos con la crema de queso y añadimos la cucharada de azúcar glass. Dejamos la mezcla en un bol y lo metemos a enfriar en la nevera para que tome la consisencia perfecta.

Ya solo queda montar el postre. Una capa de hojaldre, una capa de crema y una capa de fresas. Repetimos con una capa de cada cosa. Y completamos con un hojaldre. Para termirar espolvoreamos azúcar glass para decorar.

Listo!! En un momento tenemos preparado un postre muy vistoso y delicioso.

Carrot Cake para un gran estreno

Mañana comienza a emitirse el nuevo programa en el que estoy trabajando, y para celebrarlo he decidido preparar algo dulce. Después de una votación entre mis compañeros la elegida ha sido una deliciosa tarta de Zanahoria. Esta tarta tan común en Estados Unidos e Inglaterra, parece que poco a poco, va creando su propio club de fans aquí, en España.

A mi me encanta, solo espero que el resultado esté a la altura de la ocasión.

 

 

Ingredientes: - 300 ml de aceite de girasol

                      - 225 gr de azúcar moreno

                      - 4 huevos

                      - 150 gr de miel

                      - 350 gr de harina con levadura incorporada

                      - 2 cucharaditas de canela en polvo

                      - 2 cucharaditas de clavo molido

                      - 1 cucharadita de jengibre en polvo

                      - 1 cucharadita de bicarbonato sódico

                      - 200 gr de zanahorias ralladas

                     

Para el glaseado: - 500 gr de queso Philadelphia

                            - 4 cucharaditas de ralladura de naranja

                            - 4 cucharadas de zumo de naranja

                            - 4 cucharadas de azúcar glas

Para decorar: cáscara de naranja caramelizada

Para empezar, debemos tener dos moldes exactamente de la misma medida, yo uso de silicona, pero si no contamos con dos moldes bajos de la misma medida, cogeremos un molde más profundo y cortaremos el bizcocho por la mitad. Engrasamos los moldes y os enharinamos para que no se nos pegue en absoluto el bizcocho.

Precalentamos el horno a 180º arriba y abajo.

Lo primero es colocar un cazo al fuego con agua y a zanahoria. Dejaremos que cueza unos minutos para que se ablande la zanahoria. Luego retiramos y dejamos enfriar.

Por otro lado cogemos un bol grande y mezclamos el aceite con el azúcar y con los huevos.

A continuación añadimos la miel y batimos todo bien.

Después añadimos la zanahoria y batimos con batidora eléctrica par aque se desmenuce la zanahoria lo máximo posible. Después comenzamos a hechar la harina tamizada y seguimos batiendo con varillas. Y por último la canela, el clavo, el jengibre y el bicarbonato y mezclamos todo bien. En algunos casos se puede añadir en este punto coco rallado, pasas y nuces picadas (unos 50 gr de cada uno). Yo lo he evitado porque creo recordar que a alguna compañera no le gustaba en coco, así que espero no haber fallado.

Con la masa conseguida, rellenamos a partes iguales los dos moldes. Yo, como tenía un poco más de masa de la cuenta, he rellenado también unos moldecitos de tamaño ración. Lo importante es que los dos moldes tengan la misma cantidad de masa. Horneamos entonces durante 35 min, o hasta que metiendo un palillo, éste salga completamente limpio.

Mientras horneamos, colocamos en un cazo al fuego, azúcar con un chorrito de agua y dejamos que se disuelva poco a poco. Cuando haya espesado introducimos unos minutos tiras de piel de naranja para caramelizarlas. Las sacaremos y dejaremos secar y endurecer separadas unas de otras.

Por último, prepararemos el glaseado juntando en un bol el queso crema, el zumo de naranja, el azúcar glass tamizado y la ralladura de naranja. Batimos con batidora de varillas,hasta que quede cremoso.

Para terminar queda montar la tarta completa. Colocaremos un bizcocho en la base y cortaremos la parte abombada para que quede recto. Utilizaremos la mitad del glaseado para unir los bizcochos. Ponemos encima el otro bizcocho y lo cubrimos todo con el glaseado que nos sobra. Para terminar decoramos con las tiras de naranja caramelizadas y un poquito de ralladura de naranja.

¿Os gusta el resultado? Mañana la pruebo y os digo que tal ha quedado.

Navidades tardías 2: El glaseado

Como os comentaba en la entrada anterior, las galletas glaseadas de este año han sido con motivos navideños pero podéis elegir lo que más os guste. Eso sí, cargaos de paciencia, porque esto es como hacer manualidades, te lleva un par de horas y hay que tener mucha paciencia.

Lo primero es preparar el area de trabajo con todo lo que vas a necesitar. por un lado, las galletas horneadas y frías. Por otro lado el glaseado, colorantes en crema, mangas pasteleras o biberones para decorar, y todo lo que quieras incluir en la decoración de tu galletas.

Igredientes para el glaseado: 

- 400 gr de azúcar glass tamizado (debe ser comprado, no sirve el hecho con termomix)

- 2 claras de huevo (Pasteurizadas son las ideales, de las que venden en Mercadona)

- Media cucharadita de cremor Tártaro

- Aroma al gusto (en mi caso, de cereza)

En un bol ponemos las claras y el cremor tártaro, con un tenedor batimos hasta disolver el cremor tártaro y que empiecen a espumar las claras. Entonces comenzamos a batir con batidora de varillas.  Luego incorporamos el aroma elegido y seguimos añadiendo azúcar glass y batiendo.

Debemos conseguir dos texturas diferentes: una parecida a la pasta de dientes para bordear, y otra más parecida a la cola de carpintero para rellenar.  Así que divideremos en dos la glasa y espesaremos una más que la otra con el azúcar glass.

Una vez conseguido, separaremos en tarritos más pequeños en función de los colores que necesitemos. Si vamos a usar 4 colores, necesitaremos 8 tarritos. uno para pordear y otro para rellenar en cada color.  Procedemos a añadir el colorante en los colores elegidos.

Una vez listo hacemos los diseños como más nos gusten.

Yo siempre intento hacer la glasa que voy a utilizar y no más, porque de un día para otro, aunque la conservemos en frío, las texturas cambian y ya no es exactamente igual a la hora de dibujar. 

Ánimo, esto es cuestión de creatividad personal. Aquí os dejo una muestra de mis resultados.

Navidades tardías: Galletas glaseadas

Siento la tardanza; vuelta de navidades en Asturias, comienzo en nuevo trabajo, al final, sacar 5 minutos para escribir una entrada parecía tarea imposible. Pero aquí está finalmente, una entrada postnavideña dónde os presento mi receta de galletas.

Este año toda la familia hemos decidido pasar las fiestas en Asturias, así que algunas tradiciones han cambiado esta vez. La sorpresa ha estado en la decoración de la mesa. Normalmente siempre hay un regalo sorpresa en cada plato y, esta vez, el regalo han sido unas galletas caseras. Unas bolsitas con motivos navideños y el nombre de cada comensal en una tarjetita, era lo que podías encontrar este año en cada plato.

Así que os voy a dar la receta de mis galletas de mantequilla, y el truco para decorar con glasa. 

GALLETAS DE MANTEQUILLA

Ingredientes: - 250 gr de mantequilla a Temperatura ambiente

                      - 250 gr de azúcar glass

                      - 1 huevo xl a temperatura ambiente

                      - 650 gr de harina tamizada

                      - 1 chorrito de leche

                      - aroma al gusto

(Con estas cantidades conseguiréis una muy buena cantidad de masa para galletas. En mi caso dupliqué las cantidades para hacer cientos de galletas. Eran muchas bolsitas para rellenar)

Para empezar, batimos la mantequilla hasta conseguir una textura suave. Mezclar el azúcar tamizado poco a poco hasta que quede totalmente integrado y quede esponjoso.  A continuación incorporar el aroma elegido (en mi caso suelo usar aroma de azahar, pero se puede poner vainilla, naranja...)

Ponemos el huevo ligeramente batido y seguimos mezclando. Añadimos la harina poco a poco, tamizada, y cuando la masa comience a desmigarse incorporamos el chorrito de leche hasta conseguir la consistencia adecuada.

Una vez hecha la masa, olocar sobre un papel de hornear. le damos forma redonda y cortamos en 4 trozos. Extendemos uno a uno sobre papeles de hornear, con ayuda del rodillo y cubiertos siempre por otro papel de horear. Cuando consigamos una capa uniforme del grosor que nos interese habremos terminado. A mi no me gustan muy finas porque quedan más duras así que intento que sean un poquito más gruesas, un centímetro más o menos. Después las metemos en la nevera toda la noche para que la masa coja la consistencia adecuada.

Después, y con la ayuda del cortador que elijamos, en mi caso he escogido cortadores con motivos navideños, vamos hahacer los cortes y a hornear las galletas.

Precalentamos el horno a 180ºC.

Cogemos la primera plancha de masa y cortamos tantas galletas como nos permita el cortador. siempre dejamos una distancia de un centímetro entre galletas para que no se nos peguen unas a otras. Con los recortes, hacemos una bola que extenderemos y meteremos a la nevera otra vez para hacer más galletas.

Horneamos durante diez minutos, o hasta que queden doraditas.